24 de agosto de 2008

Éxodo

Estuve esta última semana armando el escenario que pienso dirigir próximamente cuando termine con D&D. El mismo lo armé usando lo que mis jugadores fueron diciendome que tenían ganas de jugar y, si bien recién está armado el esqueleto, creo que quedó algo bastante copado para jugar varias aventuras.

A continuación posteo una introducción al escenario futurista de Éxodo. Espero que sea de su agrado (y si no lo és, tírense a un pozo).


Éxodo

Los humanos no siempre vivimos en este infierno. En tiempo anterior a las bestias y las máquinas, nuestros ancestros dominaban este mundo. En aquellos tiempos antiguos el paisaje era distinto: el desierto no existía, el aire era fresco, las aguas eran puras y las bestias nos temían. En los tiempos de los Antiguos, los humanos éramos los reyes del paraíso.

¿Qué sucedió con el Paraíso? Nadie lo recuerda. Algunos dicen que fue Dios quien castigó a la humanidad por sus pecados, expulsándola de allí. Otros dicen que la arrogancia de nuestros antepasados los llevó a marchitar el mundo entero, contaminando las aguas y el aire. Yo creo que debe haber sido la estupidez del ser humano la que lo llevó a condenarse, ya sea por medio de guerras o enfermedades. El caso es que ya nadie lo recuerda. Y a nadie le interesa.

Ahora vivimos en el infierno. Las bestias son dueñas de las estepas y montañas y nos cazan cuando nos aventuramos en lo salvaje. Si ellas no nos matan, el sol y las aguas envenenadas de seguro lo harán. Lo único que alguien como vos y yo podemos hacer es habitar en los Refugios y rezar para poder sobrevivir un día más. Pero por muy bien defendido que tengamos nuestro hogar, los enemigos abundan. Es verdad que las bestias no se acercan a nuestros territorios, pero los Nómadas y las Máquinas sí.

Los primeros pueden ser pacíficos en apariencia, pero no te dejes engañar. Ellos son humanos que viven Allá Afuera y, como todo lo que proviene de ese infierno, son peligrosos. Algunos Nómadas pueden tener buenas intenciones, como aquellos que hace meses intercambiaron gasolina y armamento por comida y medicina con nosotros. Pero también están los que nos atacan a la menor oportunidad para matarnos y tomar nuestro Refugio.

Las Máquinas, por otro lado, son lo peor. Por más peligrosos que sean, a las Bestias y a los Nómadas puedes dispararles y matarlos, pero eso no funciona con las Máquinas. Éstas son enormes y poseen un armamento capaz de volar en mil pedazos nuestro hogar. Afortunadamente, las Máquinas no parecen interesadas en nuestros asuntos. Al menos no en los de nuestro Refugio. Pero si las ves marchando por las llanuras lo mejor que puedes hacer es huir por tu vida, ya que nunca se sabe qué demonios pasa por los circuitos de esas cosas. Si bien pueden ignorarte, también pueden cazarte y aplastarte. O peor… seguirte hasta nuestro Refugio y destruirlo.

Y claro, a mí también me encantaría quedarme dentro de este lugar, lejos de toda la mierda que hay Allá Afuera; pero los recursos escasean y, nos guste o no, a veces debemos aventurarnos en ese infierno en busca de provisiones. Tal vez no estaría tan mal una muerte rápida en las manos de una bestia de las Estepas. Al fin y al cabo, la vida que llevamos es horrible.



Eso es todo por ahora. Más adelante iré agregando más información sobre el escenario.

Cya, Space Monkey.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Peterete! Eso es re choreado del Fallout!

...

No digo que sea malo, si miras warhammer es un robo de todos los setings habidos y por haber y es genial!

No digo qua tampoco sea genial he!

CHUPALA

Dragonmarked dijo...

Me imaginé, pero como no jugué al Fallout... puedo decir que ellos viajaron en el tiempo y me robaron la idea!

Elias dijo...

Che esta buena la movida, y no es tan fallout. Aunque digamos la movida post apocaliptica tiene ciertos parametros que se repiten en cualquier lado.
Me interesa el setting, con que sistema pensas correrlo?

Dragonmarked dijo...

Posiblemente voy a hacer una simplificación del sistema de D20 Moderno, con el objetivo de quitar la necesidad de usar la grilla y para hacerle más fácil las cosas a mis jugadores, que no son muy adeptos a las reglas.