4 de noviembre de 2007

Luego de la Jornada D&D Day

A continuación podrán leer sobre la jornada que realizamos en DeRol para festejar el D&D Day 2007. Es probable que a nadie le interese, pero como estoy medio al pedo hoy, lo voy a escribir igual.

Fue un día complicado. Solo pude dormir 4 horas, ya que me levanté a las 10 de la mañana para ir a imprimir las fichas y la aventura que iba a dirigir. Tomé el subte, imprimí todo en Copy-ar (un local donde, junto con Mariano, nos dedicamos durante mucho tiempo a despilfarrar nuestro dinero en impresiones de rol). Para eso de las 12 ya estaba en Cabildo y Juramento, con la aventura bajo el brazo, la pesada mochila llena de miniaturas, fichas y dados y un dolor de estómago bastante jodido. Luego de buscar en vano un local donde comprar un pancho (ni el local de juramento, ni el Peter´s de Monroe estaban abiertos), terminé comprando hamburguesas para llevar en Burguer King (y, de paso, pasando por el baño para resolver el inconveniente del estómago).

Llegué antes de la 1 a Ciudad Universitaria. Para esa hora ya había cola en la puerta de la biblioteca del pabellón 2. Casi todos los DMs (mucho más responsables que yo) ya estaban listos, cada uno en su mesa preparando las aventuras que iban a dirigir. Los muchachos de DeRol estaban ocupados con la organización (había que atender un kiosco, poner gente en la puerta, organizar a los DMs, y realizar otras tareas varias) y el Ogro Alegre tenía todo su stand listo para atender a los roleros hambrientos de dados y miniaturas. Yo, por mi parte, me dediqué a romper las bolas a los organizadores hasta que se hizo la 1, y las puertas se abrieron, comenzando con el festejo del D&D Day 2007.

De a poco las mesas se fueron llenando, y, como mi aventura (el Killer DM) no había atraído la atención de los concurrentes, le dí una mano a Outsider con el kiosco. Supongo que, para la próxima, voy a hacer fuerza en la organización para que las mesas especiales (el Killer DM y las mesas del Dungeon Delve) estén en el centro de la jornada, cosa de atraer más la atención. El caso es que esas mesas especiales quedaron medio relegadas y fuera de la vista de la gente (y ni siquiera el cartel que puse sobre mi mesa ayudó a atraer a los roleros).

El trabajo en el kiosco fue divertido. Apliqué mis conocimientos de publicidad para hacer unos carteles muy simpáticos (eso me demostró que no estoy derrochando dinero en la universidad... "Subí a nivel 8 y comete un bizcocho"... man, soy un genio publicitario). Lástima que en un momento se nos empezó a inundar el lugar y me vi obligado a trapear el piso y escurrir el agua en un balde sucio. Creo que los químicos que habían en los trapos de la facultad me afectaron, porque juraría haber visto a Kalessin y Wocky de Tierra II. Luego de terminar mis trabajos de esclavo, me puse a sacar fotos (de nuevo, mis conocimientos artísticos rindieron frutos) y por último, usé mis conocimientos de Perito Mercantil para vender rifas en las mesas. En resumen, me dediqué a romper las pelotas a todos los DMs del lugar.

A eso de las 5 y media conseguí ilusos, digo... gente para jugar mi aventura. El Killer DM iba a estrenarse.

Aquí hago una pausa para explicarles qué es el Killer DM.


Foto de mí el D&D Day 2006,
luego de
marcar en mi brazo el TPK
Todo surgió de copiar un evento de las jornadas yanquis, en el cual (en medio de un ring) un DM se dedicaba a matar PJ tras PJ de las formas más rebuscadas e injustas posibles. Los jugadores se subian con su personaje al ring y comenzaban a jugar. El DM, se dedicaba a matar al personaje y llamar al siguiente competidor. Los organizadores de DeRol (no estoy seguro de si fueron Henry y Wocky) tiraron la idea de hacer algo parecido en el D&D Day, y yo
(conocido por ser un DM algo mortífero en las jornadas)
me ofrecí para preparar el evento.

Lo que hice fue simplificar un montón el sistema de 3.5 y armar personajes pregenerados muy fáciles de usar. Debo admitir que gran parte de mi motivación fue aplicar todo lo que vengo leyendo sobre 4ta Edición, y varias ideas del juego de cartas Munchkin que me compré hace poco. Debo decir que fue muy divertido inventar habilidades para los PJs, y luego armar monstruos que fuesen desafíos bien jodidos.

Mi plan original era armar tablas de habitaciones aleatorias junto con encuentros aleatorios. Así, cada vez que los PJs entraban a una habitación, podían salir toda clase de encuentros bizarros dentro de escenarios igual de raros. Lástima que por falta de tiempo no llegué a hacer las tablas.

De todos modos, pude terminar los 11 personajes pregenerados y alrededor de 50 monstruos listos para ponerlos a prueba en la aventura más bizarra que dirigí en mi vida. Debo agregar, con orgullo, que además diseñé las fichas de los PJs (usando mis conocimientos de Diseño Gráfico) y, la verdad, quedaron geniales. (Pareciera que en esta jornada puse a prueba todos los conocimientos que adquirí en la facultad y el secundario... y yo que pensaba que esas cosas eran pura habladuría...).

Volviendo a la jornada:

El primer grupo que se armó fue el más divertido. Eran 6 personajes. Se encontraron con tres puertas, una de las cuales tenia una calavera. Esa misma puerta, con 4 cerraduras, llamó la atención de los PJs. Uno de ellos, confiado de que nada podía pasarle, golpea la puerta. Falla su tirada de salvación y muere.

Esa fue la primera de mis trece víctimas.

Un segundo personaje, el Elfo Mago, decide usar su conjuro de Paralizar, para paralizar a su compañero, el Gnomo Bardo, y así tirarlo contra la puerta mortífera. El gnomo supera su tirada de salvación, y, en represalia, usa su habilidad especial: copiar habilidad. Copia el hechizo del elfo y logra paralizarlo. Así, Mantalath (jugando con el gnomo) y Sfedi (jugando con un Elfo Explorador) arrojan al pobre elfo contra la puerta, el cual falla su tirada de salvación y muere horriblemente.

A esta altura yo me estaba muriendo de risa. No había puesto ni un bicho y ya tenía 2 personajes muertos. Esta aventura iba a ser una masa.

Varios personajes murieron luego en los combates (que siempre resultaron ser más jodido de lo que yo esperaba porque los jugadores se dedicaban a activar sistemáticamente todas las trampas del dungeon y entraban al combate con 20 puntos de vida menos). Otros varios murieron gracias a las trampas. Un buen ejemplo fue un Humano Monje, que luego de que al abrir dos puertas su personaje activara dos trampas y quedara en un punto de vida, decidió ser más inteligente que las puertas y romper un candado desde el cuadrado adyacente a una puerta. Lástima que activó una trampa que hizo pivotear la pared que estaba a su lado, aplastándolo contra la puerta. El nombre Killer DM no me quedó grande.

El último grupo que jugó (al cual pertenecía ese monje), llegó a enfrentarse a una Araña Espada (un monstruo que diseñé para que fuese un encuentro singular). Pese a los ataques de la araña, no pude dañar al Guerrero Enano, que tiene una CA extremadamente alta. Nota personal: tengo que diseñar una regla de CA Desprevenido. El combate tuvo que cortarse en seguida, debido a que los sorteos de la jornada estaban empezando. De todos modos, esos personajes murieron de cáncer al salir del Dungeon de la Muerte.

El sorteo lo hizo Lisandro, el pelirrojo dinosaurio del rol que viene siendo algo así como un conductor de TV (supongo que se debe a que es actor) en todas las jornadas que hacían en "Juegos De Qué?". Como era de esperarse, no me gané nada (tal vez se debió al hecho de que no había comprado rifas... pero yo lo atribuyo a mi mala suerte habitual). Lástima, porque habían varios premios muy copados (un par de miniaturas Huge, un libro de The Order of the Stick y una DMG II). Luego del sorteo, Lisandro fue poseído por el espíritu de Perón, y comenzó a arrojar los Bizcochos Domingueros a las multitudes enardecidas, que saltaban y se mataban con tal de agarrar los paquetes de bizcochos que nos habían sobrado del kiosco.

En fin, otra jornada exitosa. Si bien hubo algunos problemas (como el hecho de que las miniaturas que mandó Wizards no nos llegaron a tiempo), el balance de todo, al menos a mí, me dio muy positivo.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo queria jugar contra el Killer DM para ver si mis habilidades de supervivencia eran lo suficientemente buenas =(

Lastima que la distancia caga los planes ... buen post :P

The Outsider dijo...

Para la proxima salen más slogans en el kiosco. Eran demasiado geniales.

Dragonmarked dijo...

"A los aventureros,
les encantan los Bizcochos Domingueros"

"Matá a los kobolds y robales sus Terrabusi Variedad"

¡No sé que hago perdiendo el tiempo en este mugroso blOg! ¡Debería estar aplicando mi genialidad en la publicidad!