A todos nos ha pasado: nos armamos un personaje genial, con un super trasfondo digno de alabanzas, merecedor de elogios de parte del master y tan chaposo que ni drizzt, riddik y wolverine juntos podrían igualarlo. Y no solo eso, a nivel sistema, es una pinturita. Todo muy lindo, hasta que llega ese fatídico día. Acá es cuando te preguntas "¿qué día estará hablando este nabo ahora?" y yo respondo: "la primera sesión".
Tus compañeros, cuales estúpidos trolles jugueteando con las tripas de un cordero recién capturado (no me preguntes de dónde saqué esa imagen), arruinan la hermosura y perfección de tu sublime personaje, haciendo que se junte con "la chusma" que son sus pobres intentos de PJ. "El círculo está completo", dice el master con una voz digna de locutor del Baldur´s Gate; y escuchás el inconfundible sonido de la celda cerrándose cuando finalmente el último PJ (un enano mago con serios trastornos sexuales) termina de presentarse.
Pasa el rato. Y de repente, la hecatombe.
Nadie en el grupo da pie con bola. El ladrón misterioso trata de chorearle a una anciana, fallando el chequeo y poniendo en consecuencia a toda la guardia de Beregost (que son como tres Warriors nivel 1) tras las cabezas del grupo. El mago, deseoso de aplicar su gran intelecto para resolver el encuentro, discute dos horas con el bárbaro semi-orco cuando éste golpea (y mete un golpe crítico) al líder de la guardia, acabando con el problema "de raíz" (de raíz porque al pobre guardia no le queda un pelo para cubrirse la mitad que le queda del marulo). El bardo intenta convencer al clérigo de que gaste sus curaciones en salvar a los guardias, ya que supone que eso es lo que deben hacer los personajes Neutrales Buenos. Lo que el bardo no sabe es que el clérigo en realidad es un seguidor de Loviatar que, apenas ve la escena de muerte, sufrimiento, y confusión, se excita y empieza a repartir latigazos para todas partes (para terminar muriendo a manos del Semi-orco).
El master hace un bollito con la aventura, se la traga y empieza a darse la cabeza contra la mesa hasta quedar inconsciente.
Al final los pelotudos de tus compañeros arruinaron la posibilidad de que juegues con tu chaposo drow semi-dragón de las sombras ninja psiónico caótico malvado.
A raíz de los últimos problemas que tuve con la mesa de Eberron (que, aclaro, no fue como el texto genérico de arriba) y de mi experiencia en otras partidas tanto como master como jugador, he llegado a la conclusión de que tanto yo como mis jugadores (y probablemente vos también, fiel lector de este recién nacido Blog) necesitamos seguir algunos lineamientos básicos a la hora de armar un personaje. De lo contrario, suele suceder que el juego se siente forzado y, en palabras simples, sesión tras sesión, se vuelve cualquiera, terminando en una masacre sin sentido, o con el master cansándose de dirigir.
Así que decidí ponerme a escribir un artículo acerca de las pautas que todo jugador (y master) debería seguir para evitar los problemas causados por el mal armado de personajes. Luego, entré en internet y no me sorprendí al descubrir que alguien se me había adelantado (por mucho que intentes auto convencerte: NO SOS ORIGINAL). Pero como ese alguien escribió su artículo en inglés y sé que es una paja leerlo, decidí plagiarlo, ponerlo en mi bLog y llevarme todos los laureles. [nota para mi mismo: borrar esto ultimo para engañar quien esté leyendo esto. nota para mi mismo #2: esta clase de chistes ya perdieron la gracia hace tiempo]
Hablando más en serio, no voy a copy-pastear lo que escribió el autor (que, dicho sea de paso, pueden encontrar su artículo aquí) si no que solo voy a basarme en sus ideas y parafrasearlas para que todos los hispano-parlantes tengamos acceso a su sabiduría (lástima que tengo un solo lector, ¿no?... ¿no?...¿hola?).
Comencemos entonces.
En su artículo para armar mejores personajes (yo me conformo con que al menos sean pasables), Greg Schneider (o "el plagiado", como ustedes prefieran llamarlo), dice que hay 7 reglas que estos mismos deben cumplir. Las mismas ayudan a crear un personaje que sea divertido de jugar, y principalmente a que no solo sea entretenido para quien lo interpreta, si no también para sus compañeros jugadores (incluyendo al siempre olvidado DM). Jugar un ninja psiónico caótico malvado puede ser re-copado, pero probablemente arruine la diversión del resto de la mesa.
Las 7 reglas son las siguientes:
Regla 1: El personaje debe trabajar en un grupo.
Regla 2: El personaje debe ser divertido para el jugador y el resto del grupo.
Regla 3: El personaje debe ser bueno en el fondo.
Regla 4: El personaje debe tener una razón para irse de aventuras.
Regla 5: El personaje debe encajar en el estilo de la campaña.
Regla 6: El personaje debe tener objetivos a largo plazo.
Regla 7: El jugador debe ser capaz de jugar ese personaje.
Algunas de estas parecen obvias, otras no tanto, pero el caso es que generalmente no se les da la bola que merecen y terminan ocurriendo errores en la creación de personaje. La idea es que con tu DM al lado, revisen entre los dos (y estén de acuerdo los dos) si el personaje que armaste cumple con las reglas. Si lo logran, felicidades, armaste un buen personaje y te mereces una estrellita de premio en la frente.
Como creo que ya me explayé demasiado en este tópico y dudo que hayas leído hasta acá, así que dejaré el análisis de cada regla para la próxima.
Luke, que la fuerza te acompañe.
2 comentarios:
estoy de acuerdo con las 7 reglas, pero aun asi, creo que se pueden armar 2 o 3 personajes, que puedan trabajar en grupo, que sean divertidos, y que no sean malos de corazon, y que a pesar de todo, se lleven como perros entre ellos, el parto de armar un party no puede evitarse, pero por lo menos con esto, aparece la opcion de la cesarea (metafora bizarra, lo se)
Excelentísimas las 7 reglas. Me acaban de pasar el link de está página, me han gustado mucho los consejos y opiniones. Estás bookmarkeado! :P
Y creo que lo que Asmodeus dijo no se contradice para nada con lo que vos pusiste, de hecho creo que el conflicto entre personajes es muy divertido, siempre y cuando sea producto de un choque de caracteres y no un choque de objetivos o valores. Si un PJ es siempre corajudo y el otro precavido, es natural que discutan, pero si uno solo quiere matar monstruos y el otro solo le interesa las relaciones diplomáticas entre especies, bueno, ahí no va a funcionar.
Un saludo, los estoy leyendo...
ZOOROOS
Publicar un comentario